Cada vez hay más responsables informáticos que se encuentran con la petición de empleados y superiores del interés en utilizar dentro de la oficina hoverboards para un desplazamiento rápido y cómodo. Se ha convertido en una tendencia muy habitual debido a la moda y a lo práctico que puede resultar para quienes necesitan moverse con rapidez a través de las distintas salas del entorno de trabajo. ¿Pero es seguro el uso de estos vehículos en la empresa? La última noticia procedente de Estados Unidos confirma que no es así y que en las empresas se debería tener la máxima precaución con lo que pueda ocurrir en el uso de este método de transporte.
Una trampa que hay que desaconsejar
Después de que se hayan registrado numerosos incidentes tanto en el sector corporativo como fuera de él, las autoridades no han tardado en pronunciarse al respecto. Desde la comisión de seguridad de Norteamérica indican que los hoverboards “suponen un razonable riesgo de fuego” en el caso de no cumplir con los estándares de seguridad que deben pasar este tipo de medios de transporte. El problema es que según ha determinado el gobierno estadounidense, actualmente no existe ningún hoverboard que cumpla con los estándares del mercado. Esto supone un gran obstáculo para las empresas que lo habían introducido como una forma de permitir a los empleados moverse por las distintas instancias de la oficina con facilidad y rapidez.
¿Qué ocurre si alguno de los empleados de nuestra empresa utiliza uno de estos hoverboard? A priori es un riesgo y como responsables de la tecnología que se usa en la empresa debemos estar al tanto. Lo último que queremos es que se produzca un incidente, que el dispositivo se incendie y que provoque algún daño tanto material como humano. Que se incendie el vehículo de transporte no es algo que vaya a ocurrir de forma segura, pero existe una ventana que apunta a que esto pueda pasar. Por lo tanto, es preferible evitar introducirnos en situaciones de riesgo. En Estados Unidos se avisa de que se retirarán estos vehículos y que incluso se solicitarán de vuelta a quienes hayan realizado su compra, a fin de evitar incidentes.
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Un peligro muy de moda
Los hoverboard, que disponen de un sistema de equilibrio que permite a los usuarios desplazarse por encima del suelo con gran velocidad, comenzaron a ganar fama cuando los famosos los usaron en público. Sus ventas alcanzaron grandes volúmenes debido a que se vio cómo artistas de la talla de Justin Bieber los empezaron a usar. En la empresa el eco de su popularidad no llegó por la influencia de estos famosos, sino por la inquietud de que los ejecutivos tuvieran una forma más llamativa y sencilla de moverse en sus oficinas. Pero no tardaron en producirse incidentes, en incendiarse algunos de estos vehículos e incluso en explotar algunas de sus baterías, provocando resultados muy negativos entre los usuarios que habían confiado en ellos.
En un periodo reciente se han registrado daños millonarios debido a los incidentes causados por el fuego que ha emanado de los hoverboards. No se habla desde Estados Unidos sobre prohibir este vehículo por el simple factor de prohibirlo, sino de buscar la manera de que puedan cumplir con los estándares de seguridad necesarios a la hora de mantenerlos dentro de las empresas. El plan es que en próximamente se comiencen a probar nuevos modelos que lleguen a cumplir con estos rasgos y que se puedan aceptar para su uso en la oficina.
Mientras tanto las autoridades especializadas en seguridad recomiendan que las empresas tengan en cuenta el riesgo que puede suponer el uso de estos vehículos de transporte personal. En lugar de ellos se recomienda confiar en otras alternativas. Por ejemplo, en los últimos años se ha visto cómo una nueva generación de ejecutivos ha adoptado el uso de la bicicleta dentro de la oficina, al menos en aquellos espacios que son más grandes de lo normal y que se benefician de un desplazamiento más inmediato. Es algo en lo que se puede seguir confiando de momento a la vista de que los hoverboard todavía están lejos de alcanzar un nivel de aceptación que les permita estar presentes en las empresas de todo el mundo sin suponer un riesgo para la seguridad.