En la búsqueda de la mejor tecnología para la empresa hay distintas soluciones en las que podemos depositar nuestra atención. Como expertos en TI nos interesa aumentar el rendimiento de nuestro equipo, proporcionar soluciones de calidad y conseguir facilitar nuestro trabajo. Es por ello que la adopción de un teléfono SIP se encuentra entre las principales prioridades que podemos tener en mente. Este tipo de tecnología aporta una notable serie de beneficios y se encuentra entre las tendencias que están adoptando las empresas en los últimos años.
Si te interesa este tema, no te pierdas esta guía gratuita que puedes descargarte en PDF:
http://mkt.apser.es/contenido-no-activo
¿Qué entendemos como un teléfono de tipo SIP?
El uso de teléfonos con tecnología SIP (Session Initiation Protocol) se encuentra referido a aquellos terminales que disponen del uso de sistema VoIP. Permiten introducir una mecánica sencilla en el entorno de la empresa al permitir que se realicen llamadas desde redes IP, facilitando el rendimiento y aumentando la capacidad de control que tienen las entidades sobre sus comunicaciones.
Hay dos tipos principales de este tipo de teléfono entre los que se puede elegir dependiendo de cuáles sean los recursos y necesidades de cada empresa. Por una parte están los teléfonos que se basan en el software, tratándose de una de las opciones más elegidas en todo tipo de empresas. Es un planteamiento sencillo y rápido de configurar, que se hace con beneficios importantes a la hora de proporcionar un buen sistema de llamadas a la empresa. La configuración está simplificada, dado que solo hay que sacar provecho a los altavoces de un ordenador (recibir sonido) y a un micrófono (enviar sonido) para comenzar a gestionar llamadas. Hay algunos modelos que se han hecho con la atención de las empresas de manera significativa, como es el caso del fabricado por Xten o de la versión 3CX ideada para su uso con el sistema operativo Windows.
El otro de los modelos de teléfono SIP es el que funciona a través de hardware en vez de software. Su principal rasgo se encuentra en su aspecto, puesto que no aporta ninguna diferencia respecto a los teléfonos clásicos. Esto aporta mucha normalidad al día a día en el trabajo, ayudando sobre todo a los empleados que tienen una mayor complicación para amoldarse a las nuevas tecnologías. El funcionamiento también es idéntico al de un teléfono tradicional. Lo que lo diferencia respecto a los teléfonos clásicos es que este dispositivo se encuentra conectado a una red de datos, con todo lo que eso supone para su rendimiento operativo. Se comparte directamente la conexión con el ordenador de forma que no haya que instalar un punto de red exclusivo para el teléfono, lo que facilita colocar estos equipos dentro de la oficina.
Beneficios de esta tecnología
El mayor cambio que ha introducido en las empresas la instalación de este tipo de teléfonos y de las llamadas VoIP se encuentra en la facilidad de uso. Con el paso de los años vemos que desde el departamento TI se van reduciendo los recursos que se requieren invertir en el aprendizaje de sistemas clásicos. Se facilita el trabajo, se reducen los periodos de aprendizaje y en general se reduce el tiempo que hay que invertir en asegurarse que la tecnología hace su trabajo de manera eficiente con cada uno de los miembros de la empresa. Una de las ventajas de estos teléfonos es que su interfaz está muy simplificada, permitiendo desde ella administrar todas las funciones con sencillez.
El entorno de una red basada en el uso de estos teléfonos está más conectada, mejor integrada entre sí y se adapta a lo que se necesita en cada momento por medio de sistemas web. Los responsables TI pueden tener, con un simple vistazo, una idea real de cómo se encuentra la red en cada momento, sabiendo que todo está controlado y que no hay nada de lo qué preocuparse.
Al mismo tiempo, y aunque no suele ser lo que más preocupa al informático, con los sistemas VoIP se ahorra de forma significativa, se simplifican los sistemas de instalación y se mejora el entorno de la oficina gracias a la reducción de los cables que hay por medio. No menos importante, es un tipo de tecnología segura y escalable, lo que significa que siempre tendremos la capacidad de personalizar la instalación en base a las necesidades que existan en cada momento en la empresa.
Si te ha interesado este post, quizás también te interese:https://mkt.apser.es/contenido-no-activo