Ya sabes que las nuevas tecnologías suponen un gran avance en la actividad diaria de muchos negocios, porque aumentan la productividad, el rendimiento y ahorran tiempo y esfuerzo a los empleados. Para aquellos negocios que realizan ventas directas al público hay una herramienta que puede garantizar los mejores resultados y que es muy utilizada para el día a día. Se trata del TPV o sistema de venta automatizado, que se instala en el equipo del negocio y viene a sustituir a las clásicas cajas registradoras.
Ventajas de utilizar la gestión por TPV
Además de realizar las labores propias de la caja registradora, este tipo de software incorpora extras como una parte de inventario, control de caja, impresión de facturas y mucho más. Normalmente, está compuesto por un parte física y un software adaptado a las necesidades de la empresa.
- El primer beneficio es que en un mismo programa puedes hacer diferentes gestiones que antes debían realizarse de forma física y por separado. Como te hemos dicho, tienes la oportunidad de hacer directamente el inventario en el programa, emitir tickets y por supuesto realizar todo el proceso de venta con diferentes formas de pago.
- Además, el sistema es capaz de almacenar diferentes datos para utilizarlos en un futuro o para cerrar la actividad, lo que reduce gastos y tiempo a la hora de hacer las gestiones de forma física.
- También agiliza el proceso de venta, lo que reduce esfuerzos por parte de los trabajadores y también colas y esperas innecesarias a los clientes.
- Mejora la imagen de la empresa, que transmitirá a los futuros clientes una sensación de saber hacer y de gestión impecable de los recursos.
- Los tickets y facturas suelen ser mucho más detallados que los que se generan con la máquina registradora, lo que supone un beneficio inmediato al cliente.
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Aspectos a tener en cuenta a la hora de instalar un TPV
A pesar de todas las ventajas de las que te hemos hablado y de las facilidades que un sistema de gestión TPV pone a disposición de todo tipo de empresas, hay que tener en cuenta una serie de factores a la hora de tomar la decisión de instalar un sistema de este tipo.
- Supone una inversión inicial importante: Al estar compuesto por un hardware determinado y también por un programa concreto, los costes de este tipo de producto pueden no estar al alcance de todos los bolsillos. Es por eso que antes de hacer la inversión debes pensar en las necesidades concretas de tu empresa y hacer un balance para tomar la decisión.
- Requiere un mantenimiento periódico: Tanto en cuestiones de soporte externo, si surge algún problema y hay que arreglarlo, como de actualización de software para que todo funcione correctamente.
- La información es susceptible de perderse: Estas herramientas están diseñadas para el almacenaje de datos en versión digital. Esto provoca que si surge algún problema de software esta información puede perderse y no ser recuperada, algo que no sucede si se recopila de forma física.
- En los sistemas de pago con tarjeta, requiere unos gastos mensuales a pactar con la entidad.
A pesar de que los sistemas de gestión por TPV son una herramienta muy útil para la mayoría de las empresas, antes de tomar la decisión hay que pensar en las ventajas y desventajas de su utilización, y analizar los pros y los contras que se nos presentan.
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