Como ya hemos visto, estar conectado a internet es una necesidad básica para las empresas y la gran mayoría de ellas ya cuenta con acceso a la red. A la hora de cubrir esta necesidad, muchas compañías recurren a instalar una red de internet wifi en sus oficinas, ya que se trata de una tecnología sumamente popular y accesible.
El wifi en la empresa
El wifi o «wireless internet» es un mecanismo de conexión inalámbrica de dispositivos electrónicos con un alcance aproximado de unos veinte metros en interiores. Dentro de este radio de acción, pueden conectarse todo tipo de dispositivos a la red: ordenadores, smartphones, libros electrónicos, dispositivos de audio digital… Se trata de una tecnología tremendamente cómoda, ya que permite el acceso de múltiples ordenadores y dispositivos móviles sin gastos de infraestructura ni cableado. También facilita el dar acceso a Internet a visitantes e invitados de la empresa. Además, la Wi-Fi Alliance (organización comercial que adopta, prueba y certifica que los equipos cumplen los estándares relacionados con la red inalámbrica local) asegura una compatibilidad total entre dispositivos con la marca Wi-Fi en cualquier parte del mundo.
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Seguridad: cómo monitorizar una red wifi
Frente a todas estas ventajas, el mayor inconveniente de las redes wifi es la seguridad. Si se instala una red wifi sin tener la seguridad en mente, es posible que esta quede totalmente abierta o muy fácilmente accesible por parte de terceros. La configuración por defecto de los dispositivos como los routers suele ser muy insegura, así que esta situación es más habitual de lo que debería.
Una red wifi insegura representa un obvio peligro para la empresa. No solo permite que personas ajenas a la compañía puedan acceder a la conexión de manera gratuita, sino que además podría facilitar a terceros el acceso a la información compartida en la red y así dejar desprotegidos los datos confidenciales de la empresa o su información bancaria. Por eso, es esencial monitorizar la red wifi para asegurarnos de que no hay usuarios no autorizados accediendo a la misma.
La primera pista de que alguien podría estar accediendo a la red wifi de la empresa es la velocidad de conexión. Si esta parece más lenta de lo habitual, sobre todo a ciertas horas del día, puede ser señal de que hay más dispositivos de los previstos usando la conexión. Otra pista importante es la luz del router destinada a wifi, a veces conocida como WLAN: si sigue parpadeando tras apagar todos los dispositivos inalámbricos de la empresa, podría indicar que hay otros usuarios conectados.
Para confirmar esta sospecha, existen programas que monitorizan la red wifi y nos indican los usuarios conectados en cada momento. Para saber lo que ha ocurrido en el pasado, debemos acceder a nuestro router para obtener la información del registro de conexiones.
Para proteger una red wifi insegura, el primer paso es cambiar la contraseña que viene por defecto. Lo ideal es buscar una contraseña larga y que combine mayúsculas, minúsculas, números y símbolos. También es posible cambiar el nombre de la red para facilitar menos pistas a posibles intrusos.
Para poner en marcha opciones de configuración más avanzadas y garantizar un acceso a wifi con la máxima seguridad para la empresa, lo mejor es ponerse en manos de expertos. De esta manera será posible disfrutar de todas las ventajas de las redes wifi sin inconvenientes para la seguridad de los datos de la empresa.
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