En el anterior post, hablábamos de cuáles son los pasos que debemos seguir para asegurar que la migración de nuestros sistemas a la nube se hace de la forma correcta, con el objetivo de minimizar los errores o la pérdida de información de cualquier tipo. A continuación presentamos el resto de pasos a seguir. ¡No te los pierdas!
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Una migración exitosa con un diseño eficiente
3. Establecer cuidadosamente las fases del proceso
Una vez que se han dado los pasos básicos y se han tomado las decisiones clave, llega el momento de determinar las fases en las que se va a llevar a cabo el proceso de migración. Cuanto más grande sea la empresa y más filiales existan, la tarea será más compleja, por lo que no debe dejarse nada al azar. Un diseño riguroso que contempla
qué ha de hacerse en cada fase ayuda a una implantación más satisfactoria.
4. Asegurar la operatividad y la continuidad
Los proveedores de servicios mejor valorados por las compañías son aquellos que permiten la continuidad, tanto en momentos de interrupciones como en plena migración. El entorno empresarial es cada vez más competitivo, y los negocios no pueden permitirse interrumpir su actividad por largos espacios de tiempo. Por ello es necesario un
servicio solvente que permita la operatividad y continuidad prácticamente en todo momento.
5. Prestar especial atención a la seguridad TI
En el escenario actual la seguridad TI es clave, dada la variedad y multiplicidad de amenazas existentes. No solo están en juego los datos, sino también el normal desarrollo de la actividad económica. Un fallo de seguridad puede suponer millones de euros en pérdidas, por lo que es
imprescindible invertir en soluciones que cuenten con una encriptación robusta para no exponerse a riesgos innecesarios.
6. Acompasar el proceso de mudanza entre las filiales que trabajan conjuntamente
Uno de los mayores errores que podrían cometerse es una migración desacompasada entre filiales. En un mundo globalizado como el que vivimos, la economía se ha diversificado, y es
habitual que dentro de una misma empresa coexistan diferentes filiales que deben trabajar coordinadamente. No debe perderse de vista este aspecto, para evitar desajustes y fallos fáciles de prevenir con una estrategia adecuada.
7. Adaptar las soluciones en la nube a las necesidades de cada línea de negocio
El estudio concienzudo de las diferentes líneas de negocio y las consiguientes necesidades relacionadas con sus características permitirá optar por una solución u otra. En función de las demandas planteadas por cada departamento, se deberá
habilitar mecanismos y aplicaciones que den la mejor en cada caso.
8. Habilitar un servicio de soporte técnico adecuado
El
soporte técnico ha de
ofrecer una respuesta rápida y segura ante cualquier fallo o eventualidad, especialmente durante la fase de migración. El hecho de contar con un servicio en la nube tiene múltiples ventajas, pero es necesario tener el respaldo adecuado ante circunstancias imprevistas. Esta disponibilidad será un factor más a tener en cuenta a la hora de elegir proveedor.
En conclusión, se deben tener en cuenta todos los aspectos descritos a la hora de planificar una migración a la nube para asegurar que sea un éxito. No solo es importante el resultado final, sino que
la etapa de migración es también clave para garantizar que los flujos de trabajo pueden continuar su actividad normal.
De esta forma se conseguirá alcanzar el objetivo final sin que en este tiempo se resientan los resultados de la empresa debido a errores en la planificación. Tener una estrategia bien diseñada es la mejor baza para desarrollar de forma satisfactoria la migración y actuar con solvencia y eficacia ante cualquier imprevisto.
Lee la primera parte del post aquí:
8 pasos para una migración a la nube exitosa (I)
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