El sector retail ha encontrado en las soluciones de tpv software la mejor opción para simplificar procesos y aumentar el rendimiento en el día a día. Desde el departamento técnico es una recomendación que se realiza a los empresarios a la vista de lo positivo que puede ser para el negocio. Y aunque hay que tener una serie de consejos en cuenta, es justo concretar que este tipo de tecnología aporta claros beneficios a las empresas. Desde el departamento técnico supone menos dolores de cabeza en el trabajo, una gestión más inmediata de todo lo que pueda ocurrir y una mayor serie de posibilidades.
Aún así, hay algunos aspectos que se deben valorar y tener en cuenta si queremos estar totalmente tranquilos asegurándonos de que los niveles de seguridad siempre son los adecuados. Lo principal es asegurarse de que la protección del comercio siempre está activa y que no hay nada delo qué preocuparse.
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Las claves para una gestión segura del tpv
Con un tpv software no hay nada más importante que mantener el sistema actualizado de forma constante. En muchas ocasiones las actualizaciones se realizan de manera automatizada y nosotros no nos tenemos que preocupar de nada. En cualquier caso, para encontrarnos más tranquilos sobre este aspecto es fundamental que recordemos revisar de vez en cuando el sistema a fin de asegurarnos de que las actualizaciones se han realizado. Si hemos contratado un servicio que incorpore actualizaciones periódicas automáticas, algo que es recomendable para reducir nuestro margen de responsabilidad en el mantenimiento del software, podremos estar muy tranquilos. Aún así, como indicamos, no está de más hacer ciertas comprobaciones con la intención de asegurarnos de que todo está bien y que así el margen de sufrir alguna complicación es mínimo.
No hace falta que te recordemos lo importantes que son las actualizaciones, un aspecto que puede parecer insignificante en ocasiones, pero que se ocupa de proporcionar la mayor defensa en el entorno tpv. Cualquier tipo de nuevo virus que se desarrolle para atacar este servicio se contrarrestará con las actualizaciones y esto evitará un problema que podría derivar en algo mayor a largo plazo.
Si hemos contratado un servicio de tpv en el cual no se garantizan las actualizaciones automáticas, tengámoslo en cuenta para estar mucho más pendientes de estas. Si se nos pasa alguna actualización y un virus ataca al sistema que haya en el negocio podrían ponerse en riesgo datos privados y otra información que introduciría la empresa en una situación problemática.
¿Pero las actualizaciones son suficientes?
Nos estaríamos engañando, y seguro que lo sabéis, al confiar únicamente en las actualizaciones periódicas. Por lo general las actualizaciones ayudan a defender el sistema después de que se descubra la existencia de un nuevo virus. Pero no previenen. Para prevenir hay otro tipo de herramientas. Y sí, si os lo estáis planteando, no deberíais dudar en instalar una de ellas. Lo más adecuado es configurar un firewall que se ocupe de dar protección al software ptv que habéis instalado en el entorno del negocio que os ocupáis de gestionar. Esto sí que garantizará que habrá un muro de protección a través del cual será virtualmente imposible que cruce nada maligno. Todos los soportes que tengan interacción con el software y que puedan derivar en una infección en este por medio de ellos deberían estar protegidos de manera adecuada con un firewall. Y a ser posible asegúrate de que se trata de un buen software, aunque sea de pago y requiera una pequeña inversión por parte de la empresa.
Por último, no nos olvidemos de las contraseñas. Lo primero que hay que recordar al iniciar el sistema es modificarla y elegir una más segura y compleja. Esta práctica es importante transmitirla a todas las personas que forman parte de la empresa para que todos los equipos estén protegidos. Además, de vez en cuando no hay que olvidar actualizar esta contraseña para no mantener una misma de forma estática. Esto ayudará a incrementar, aún más, el volumen de seguridad. Y hagamos especial hincapié en transmitir a los demás empleados la importancia de no almacenar estas contraseñas guardadas en los propios ordenadores, dado que esta es una forma demasiado frecuente de poner los sistemas en riesgo.
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