Como responsables del departamento TI nos tenemos que ocupar de mantener nuestra empresa actualizada siempre a las últimas tecnologías. En los últimos tiempos esto ha significado abrazar el cloud computing por todo lo alto. La nube se ha transformado en una pieza angular del departamento informático, siendo capaz de reducir los errores, la gestión en cuanto a mantenimiento y los costes. También es algo que se aplica a lo referente al almacenamiento masivo, que después de adoptar varias tecnologías ha comenzado a confiar también en la nube para beneficio de las necesidades de las empresas.
De todas formas, el almacenamiento masivo aún se debate entre las opciones tradicionales en formato físico y aquellas que se desarrollan de manera digital a través de la nube. Por ello es conveniente comparar las características de cada vertiente a fin de saber cuál es la opción más idónea en el caso de nuestra empresa. Hay una serie de pros y contras que se deben tener en cuenta para saber si ha llegado el momento de dar el salto a la computación en nube.
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Un almacenamiento masivo que resiste
La opción más instaurada de forma clásica supone confiar el almacenamiento masivo de la empresa a través de sistemas de almacenaje con tecnología NAS. Son sistemas que aportan confianza y cuyo rendimiento está más que comprobado, aportando características sólidas para gestionar los datos en un entorno de gran seguridad. Se pueden realizar copias de seguridad con facilidad desde una ubicación remota, con soporte de virtualización y la posibilidad de reducir los costes respecto a otras opciones. Estos sistemas ofrecen también una amplia compatibilidad con entornos de seguridad, conexión con router y funciones avanzadas. Este tipo de almacenamiento permite configurar distintas cuentas de usuario personalizando los permisos que se proporcionen a cada una de ellas.
Ventajas del uso de la nube
Pero la empresa que de verdad quiere mantenerse actualizada a los tiempos que corren y a las oportunidades más actuales sabe que en lo que debe fijarse es en la nube. Confiar el almacenamiento masivo en el cloud computing proporciona una serie de ventajas claras de las que se benefician los técnicos y los empleados por igual. Se pueden resumir en cinco puntos clave:
- Seguridad
- Bajo coste
- Durabilidad
- Sencillez
- Integración
Estos cinco rasgos se ocupan de convertir el almacenamiento masivo en nube en la tendencia de mayor proyección y la que más está convenciendo a las empresas que quieren estar actualizadas. La seguridad se garantiza por medio de la compatibilidad con los sistemas más adecuados de transmisión de archivos y datos. Se contemplan las conexiones SSL y la presencia de copias de seguridad replicadas en distintos centros de datos de manera que nunca se debe tener miedo sobre la integridad de la información. Esta siempre se encontrará a buen recaudo y accesible en todo momento. Al mismo tiempo, será complicado que se produzca una filtración al mantenerse los sistemas en nube siempre actualizados y monitorizados por los proveedores.
El bajo coste ayuda a que los departamentos TI puedan exprimir su volumen de presupuesto de una forma diferente. Si con anterioridad el almacenamiento requería que un departamento TI gastara un 25% del presupuesto anual con el que contaba, ahora esta cifra se podrá reducir de forma exponencial incluso más allá del 10% dependiendo de la opción por la que se opte.
La durabilidad garantiza que los datos o archivos almacenados siempre estarán a buen recaudo. La infraestructura de almacenaje que se proporciona a través de este tipo de plataforma está pensada para resistir, para almacenar los datos a largo plazo sin que haya ningún tipo de pérdida. Las copias de seguridad están garantizadas y una vez la información entra en la nube se puede tener total garantía de que los datos no la abandonarán en ningún momento hasta que sean eliminados por los gestores del departamento informático de la empresa en cuestión.
Para un informático es clave aportar una dinámica de sencillez en su entorno de trabajo, puesto que esto significará que tendrá más tiempo para dedicárselo a más tareas y procesos más complejos. En el uso del almacenamiento masivo en nube entra en juego el factor de que es el propio proveedor el cual se ocupa de realizar la administración y la gestión del sistema. De esta manera las responsabilidades internas en la empresas se reducen y la complejidad pasa a segundo plano.
Por su lado, la integración se aprecia en la manera en la que todos los archivos almacenados en la nube están siempre a disponibilidad de sus propietarios de una manera instantánea y segura. Se acabaron los dolores de cabeza por no tener acceso, en el momento necesario, al archivo que se está interesado en consultar.
En contraposición a las unidades NAS de almacenamiento masivo más tradicional, las opciones en nube que resultan más recomendables incluyen Amazon Glacier, Google Drive, Box, MozyPro y CrashPlan, entre otros.